miércoles, 26 de diciembre de 2007

el perfume: historia de un asesino

La sinopsis es por todos bien conocida, al menos en su inicio, la propia presentación de la película nos la relata: Jean Baptiste Grenouille nació en mitad del hedor de los restos de pescado de un mercado y fue abandonado por su madre en la basura. La autoridad se hizo cargo del bebé que fue de hospicio en hospicio y sentenció a su madre a la horca. El chico creció en un ambiente hostil, nadie le quería e incluso sus compañeros intentaron asesinarle y todo porque había algo que lo hacía diferente: no tenía olor. A cambio, Jean Baptiste poseía un olfato excepcional.

Para lograr que el espectador perciba esto, el director, Tom Tykwer expresa con imágenes algo tan intangible e invisible como el aroma. Se apoya en sabios movimientos de cámara, una precisa banda sonora, unos estupendos protagonistas y una magnífica fotografía. De este modo consigue hacer visible la esencia invisible de las cosas, el perfume.

No hay que olvidar, no obstante, que se trata de una adaptación, por lo que si entramos en comparaciones, la película pierde todo su sentido. Es cierto que la adaptación de ciertos aspectos de la novela han sido buenos, otros cambiados (no hace hincapié en lo especial que es cada chica que muere, sólo resulta especial Laura), y otros omitidos, lo que lleva al final a caer en un exceso de fantasía: Jean Baptiste logra descubrir, destilar y entremezclar en su justa medida las trece esencias para componer un perfume que todo aquel que lo olía sentía el inevitable impulso de amar con lujuria, enajenados, hipnotizados. El protagonista acaba despertando tanta pasión que su cuerpo desaparece entre la multitud, entre golpes y mordiscos, un final grotesco y perturbador.

En definitiva, es una película para ver sin prejuicios, sin comparaciones, una película oscura, siniestra, poética, erótica, hermosa, paradójica: por un lado el amor y la belleza, por otro, la muerte y la destrucción. Todo ello representad en un individuo a que la vida se lo niega todo.


Lo que más me gustó: El director se atreve a incluir toques o decisiones muy personales.

Lo que menos me gustó: Que vendan la película como “historia de una asesino”, algo totalmente incierto: un ser salvaje, primitivo, de físico rudo, que viene a este mundo sobre un lecho de despojos, sin lazos afectivos, ni amigos, que desconoce lo que es el cariño, el afecto, las caricias, curtido en trabajos esclavizadores y deshumanizadores, posea un extraordinario olfato (manifestación de su extrema sensibilidad), exclusivo de las clases altas, es revolucionario; Jean Baptiste no mata como un asesino, mata por la necesidad de cumplir su sueño, de autorrealización.

Supongo también que se puede llegar a hacer lenta, hay momentos en los que la falta de dinamismo lleva a la película a algo muy parecido al tedio.

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